Recorre alcalde escuelas para entregar obras

Ciudad Juárez.- Reunidos al interior de memorial “30 de enero” en Villas de Salvárcar las madres, padres, hermanos y amigos de los 12 jóvenes y tres adultos que fueron ultimados por un comando armado en 2010, honraron su memoria con una misa.

Han pasado 15 años de aquella trágica noche que dejó familias destrozadas, una comunidad herida, una ciudad y un país conmocionado debido a que los hechos ocurrieron durante un periodo marcado por la violencia armada en Ciudad Juárez, durante la presidencia de Felipe Calderón Hinojosa.

El recinto de color claro dejó atrás la casa con el numeral 1310 de la calle Portal de la Paloma, ubicada a mitad de la cuadra entre Villa del Sauzal y Villa del Cedro, donde ocurrió el brutal ataque en contra de un grupo de aproximadamente 50 jóvenes que se encontraban celebrando un cumpleaños.

La mayoría de ellos, estudiantes de preparatoria del Cbtis 128 y el Colegio de Bachilleres plantel 9, pero testigos aseguran que también había alumnos universitarios de la UACJ.

Entre ellos había hermanos, amigos, vecinos que se conocían de toda la vida, en las paredes se recuerdan sus nombres y de algunos sus fotografías, pues son honrados como “jóvenes mártires de Villas de Salvárcar”: Jesús Armando Segovia; José Adrián Encina Hernández; José Luis Piña Dávila; Marcos Piña Dávila; Eduardo Becerra; Brenda Ivonne Escamilla.

También Manuel Hernández Villegas; Jesús Enrique Miramontes; Jaime Rosales Cisneros; Carlos Lucio Ávila; Edgar Martín Díaz; Juan Carlos Medrano; Horacio Soto Camargo; José Luis Aguilar; y Rodrigo Cadena.

Hoy las familias se reunieron entorno a su propio dolor y a la esperanza de que cuentan con un espacio por el que lucharon para obtener un memorial, en un intento de resignificar el espacio, compartió la señora Reyna Alicia Hernández Flores, mamá de José Adrián quien tenía 17 años y era estudiante del Bachilleres 9.

Ciudad de México.- La economía de México creció 1.3 por ciento durante 2024 afectada por el debilitamiento de algunos sectores claves como la manufactura y la construcción, lo que ocasionó una desaceleración del aparato productivo.

De acuerdo con las estimaciones preliminares difundidas este jueves por el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), el Producto Interno Bruto (PIB) de la segunda mayor economía de Latinoamérica avanzó durante el año pasado Menos de la mitad del crecimiento reportado en 2023, que había sido de 3.3 por ciento.

La desaceleración se debió al comportamiento desfavorable que se registró en el cuarto trimestre cuando la economía sufrió un retroceso de 0.6 por ciento, respecto del trimestre anterior, cuando la actividad aumentó 1.1 por ciento.

El director para América Latina de la calificadora Moody’s, Alfredo Coutiño, atribuyó el comportamiento negativo del último trimestre a la transición política que se vivió en el país con la entrada del gobierno de Claudia Sheinbaum, que inició su sexenio en octubre con un presupuesto restringido, y la cautela que mantuvo el sector privado ante la nueva administración.

“La debilidad económica trimestral se explica principalmente por una contracción industrial y una desinflación en los servicios. La industria se vio arrastrada por contracciones en la manufactura y la construcción, ambas afectadas por la restricción presupuestaria al inicio del nuevo gobierno”, dijo Coutiño en un informe.

El Fondo Monetario Internacional había proyectado una desaceleración de la economía mexicana para 2024 al estimar un crecimiento de 1.8 por ciento, mientras que para este año prevé una expansión de 1.4 por ciento. Las estimaciones del organismo internacional están muy por debajo de las proyecciones del gobierno que ha calculado que el aparato productivo avanzará entre 2 por ciento y 3 por ciento durante 2025.

Coutiño afirmó que la economía de México inicia el año “con el pie izquierdo” debido a las amenazas de aranceles y deportaciones de parte del gobierno estadounidense, “así como también la incertidumbre en torno a las reformas constitucionales ya aprobadas”.

Ciudad Juárez.- Hoteleros confían en que la recuperación que esperan desde que inició el año llegue a este segmento económico con los festejos de San Valentín, así lo admitió el presidente de Hoteles en Juárez, Rogelio González Alcocer.

Según el empresario hotelero, desde el final de diciembre y hasta mediados de enero la ocupación no había superado el 40 o el 45 por ciento en los hoteles, cuando, de acuerdo con años anteriores, ya deberían rondar el 60 por ciento.

Sin embargo, confían en que el 14 de febrero la ocupación esté por encima del 90 por ciento. 

Aunque desconocen a ciencia cierta la razón de la baja en la ocupación hotelera, creen que es la falta de eventos masivos en la ciudad, lo que ha provocado las bajas cifras.   

“Para esta fecha tenemos siempre una afluencia importante de parejas, y creemos que este año no va a ser la excepción, las primeras promociones ya se empezaron a publicar en los medios y redes sociales, creemos que es una fecha que nos puede ir bien, ya que ahorita tenemos una ocupación que no esperábamos”, expresó el líder hotelero.

De acuerdo con González Alcocer, luego de las fiestas decembrinas, la recuperación empieza en los hoteles de la ciudad a mediados de enero, sin embargo, a un día del cierre de este mes, el alza en la ocupación ha tardado.

“El 14 de febrero va a ser sin duda un día muy importante para la hotelería y todo lo que son restaurantes”, agregó el empresario.

Para el Día del Amor y la Amistad, y como una forma de atraer a los clientes, los 32 hoteles que integran la asociación, generan promociones que incluyen bebidas especiales como vino o champagne, arreglos florales de acuerdo con la ocasión e incluso menús extraordinarios para el festejo, todo con precios accesibles, aseguró González Alcocer.