Niños con TDAH enfrentan adaptación a la escuela

Ciudad Juárez.- El Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), como lo dice su nombre, se caracteriza por la dificultad para poner atención o mantenerla por largos periodos de tiempo, también es común que quienes sufren de esta condición neurológica empiecen actividades nuevas antes de terminar las que ya tenían en curso, lo que complica a los estudiantes que pasan por este padecimiento adaptarse a sus clases.

El pasado 13 de julio un grupo de poco más de 200 personas: hijos, padres y madres de familia, tomaron sus automóviles y realizaron una caravana hacia el estacionamiento de una plaza comercial ubicada en la avenida Ejército Nacional, ¿la razón?  Visibilizar el TDAH con objetos color naranja y una convivencia familiar en el día mundial de este padecimiento.

De acuerdo con expertos, existen también signos más leves o sencillos que se suelen confundir con problemas del día a día, como los problemas de memoria u olvidar dónde dejan sus pertenencias.

Según el último censo de la Organización Mundial de la Salud, hay 366 millones de adultos con TDAH en todo el mundo. Las cifras del Instituto Chihuahuense de Salud (Ichisal) dicen que el 31 por ciento de las consultas realizadas en Hospital Civil Libertad en Ciudad Juárez son por este transtorno.

“El TDAH es una afección crónica, afecta a millones de niños en todo el mundo y por lo general continúa en la edad adulta. Por lo general es un tema de herencia, el 90 por ciento de los casos son hereditarios y entre sus síntomas más comunes a los niños se les dificulta poner atención y suelen tener comportamientos impulsivos”, explica Carolina Aguilar, neuróloga pediatra.

Los Usaer 

Dentro de las mil 164 escuelas de nivel básico que hay en Juárez, tanto públicas como privadas, existen un total de 12 planteles diseñados para atender las necesidades de los niños con problemas de aprendizaje. Entre la docena de escuelas, hay nueve planteles de la Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Regular (Usaer).

Estas escuelas ofrecen tutores y grupos adaptados para quienes, de acuerdo con los expertos, sufren más dificultades conforme pasan de grado, tanto en su rendimiento académico como en el diagnóstico del propio trastorno. Hasta 2022 contaban con 13 mil 723 en todo el estado.

“Lo que pasa es que, si el padecimiento es leve y los niños solo presentan desatención, es común que pase desapercibido y se les diagnostique ya en la edad adulta o durante sus estudios de preparatoria o ya incluso en la carrera”, añade la doctora Aguilar, quien también es presidenta del Colegio de Pediatría de Ciudad Juárez.

Entre esos casos está el de Juan Ramón, un joven de 14 años que hasta hace poco cursaba segundo de secundaria en la Técnica 95 y se preparaba para pasar a tercero. Esto antes de que, de acuerdo con el testimonio de su madre, fue expulsado dos meses antes de que terminara el ciclo escolar.

“A mi hijo me lo diagnosticaron apenas el año pasado, siempre hubo problemas de atención y de comportamiento, siempre hubo quejas de que era muy inquieto. Cuando lo diagnostican yo le hice llegar a cada profesor la hoja del diagnóstico para que ellos como profesores usaran sus herramientas como maestros para tratarlos”, explica Nathaly, madre del menor.

Fue en un día de clases aparentemente normal cuando según el testimonio de su madre, una de las maestras le preguntó al joven "¿Ya se medicó?", según narra Nathaly, desde ahí comenzaron los conflictos con el personal docente y los directivos de la escuela.

“Ahí empezaron los problemas, siento que empezaron a buscar cualquier situación de su conducta para llamarle la atención. Al paso del tiempo me piden que firme la baja del niño, los suspendieron dos meses antes de las vacaciones, me dijeron que se había peleado a groserías con otro niño enfrente de un profesor. Después le mandan hablar a mi esposo y le prometen que lo iban a aceptar en tercero, lo mandan a cursos de recuperación y cuando voy por su boleta ya no me dejan pagar la inscripción”, añade la mamá.

Por su parte, la Subsecretaría de Educación Zona Norte se comprometió a revisar el caso. El titular de la dependencia, Maurilio Fuentes, explicó el proceso de atención para los alumnos que presentan problemáticas similares por medio del Usaer, en donde detalló que estas unidades cuentan con personal capacitado.

“Las escuelas que son grandes cuentan con personal de Usaer que se queda uno, dos, hasta tres años en esa escuela capacitando al personal para que ellos puedan atender a los alumnos y las problemáticas que se les puedan presentar, ya si tienen condiciones que requieren más atención, pueden entrar a los Centros de Atención Múltiple. Los CAM tienen todos los grados más el de capacitación para el trabajo”, comentó Fuentes Estrada.

Nathaly espera una cita con Fuentes Estrada, este mismo señaló que iba a atender el caso para ofrecer una solución a la problemática.

“Lo que le hicieron a mi hijo se me hizo injusto. Yo sé que me hijo es vago, que tiene un problema y que no pone atención, pero no creo que haya hecho algo tan grave como para que le hicieran lo que le hicieron. Creo que se lo tomaron muy personal conmigo”, dijo Nathaly, quien no pierde la esperanza de que su hijo pueda retomar sus estudios.

Tratamientos 

Entre los tratamientos disponibles para mitigar los síntomas del TDAH se encuentra medicamentos estimulantes, que son controlados, es decir, requieren que el usuario (o su tutor en caso de ser menor de edad), quede registrado ante las autoridades federales y presenten una identificación oficial para que le sea surtida su receta. También existen terapias de aprendizaje y cognitivas. Estas últimas, según los expertos, buscan encontrar formas para que los jóvenes y niños que padecen el trastorno retengan la información que se les enseña.

Según las estimaciones proporcionadas por la doctora Carolina Aguilar, solo el 5 por ciento de los alumnos que presentan síntomas y no son diagnosticados logran concluir sus estudios universitarios. Esto pese a tener una capacidad intelectual idéntica al resto de sus compañeros de clase.

“Es una situación verdaderamente trágica en estos casos porque la mayoría de los niños con estos padecimientos tienen una capacidad intelectual normal e incluso en ocasiones por arriba de los que se considera normal. De ahí viene la importancia de mantener informados a la población y los padres sobre los síntomas clínicos y cuando ya es necesario acudir a consulta con un especialista”, comenta la profesional de la salud.